septiembre 2, 2014 6:53 pm
La venta por Internet nos permite tratar fácilmente los datos sobre los clientes, como ya comentamos en este post, no obstante perdemos muuuchos detalles. Por ejemplo, si Jorge tuviera una tienda física de móviles, cuando entrara un cliente podría ver su edad, sexo, el tipo de ropa que lleva, el tipo de peinado, si va acompañado de sus hijos/pareja, el interés que demuestra al entrar en la tienda…
Todos esos detalles los perdemos cuando alguien visita nuestra web, y una de las máximas en el comercio es adaptar nuestra oferta a nuestros clientes, y para eso hay que conocerlos.
Eso nos podría llevar a dos situaciones, según el tipo de visitante, como vamos a ver.
Cliente
Ya que a un cliente tenemos que tomarle nota de sus datos para enviarle el producto que nos compra, ¿por qué no pedirle esos datos que nos faltan? Por ejemplo, podemos preguntarle si está casado/a (para tratar de ofrecerle una tarifa dúo), la edad que tiene (para ofrecerles descuentos en juegos para móviles), si usa mucho el móvil (para ofrecerle una tarifa de móvil más adecuada), etc.
Ahora bien, la LOPD establece lo siguiente en el artículo 4:
“1. Los datos de carácter personal sólo se podrán recoger para su tratamiento, así como someterlos a dicho tratamiento, cuando sean adecuados, pertinentes y no excesivos en relación con el ámbito y las finalidades determinadas, explícitas y legítimas para las que se hayan obtenido.”
¿Para venderle un móvil tiene que darnos todos esos datos adicionales? Francamente, son excesivos, pues no son pertinentes para que le hagamos una factura y le mandemos el pedido a su casa. Por lo tanto, la LOPD no nos va a permitir que hagamos eso.
Por otro lado, si a un potencial cliente le pedís muchos datos, que no son pertinentes, seguramente directamente no os realice la compra, pues considerará que estáis metiéndoos en su intimidad, y que le estáis haciendo perder el tiempo.
Visitante
Lo más que podemos conseguir de un visitante es que se suscriba a nuestra newsletter. Al igual que hemos dicho antes, ¿es pertinente que para suscribirse a una newsletter le pidamos datos como la edad, su ciudad de residencia…? La respuesta es que no.
Y es más, aquí sí que váis a tener una pésima conversión si le pedís demasiados datos a los futuros suscriptores.
¿Y qué podemos hacer?
Nuestro amigo Jorge nos dice “¡Ya me está fastidiando de nuevo la LOPD mis ventas!”.
Tranquilos, está claro que queremos tener más información de los clientes y potenciales clientes, y si la LOPD no nos lo permite, seguimos teniendo mecanismos para conseguirlo.
¿Cómo? Pues como siempre se ha conseguido todo: dándoles algo a cambio de que nos proporcionen voluntariamente esos datos.
Por ejemplo, WooCommerce te permite generar códigos de descuento. Aprovéchalo y crea un código, por ejemplo “ENVIO-GRATIS” que sirva durante los próximos 15 días.
Ahora crea un nuevo newsletter para tus suscriptores, e indícales que si te dejan tu nombre, les darás el código de descuento.
En dicho newsletter, utiliza el siguiente campo para que MailChimp les muestre un enlace donde actualizar sus datos:
*|UPDATE_PROFILE|*
Podéis encontrar más información sobre este método en esta página.
Otra forma es que utilicen el mismo formulario de alta en tu newsletter. Cuando MailChimp detecta que alguien introduce un e-mail que ya está suscrito, le muestra el enlace para actualizar su perfil.
Ahora, tenemos que hacer que una vez que un suscriptor introduzca su nombre, le llegue tu código de descuento. Esto lo podemos hacer manualmente, mirando cada x tiempo la lista de suscritos, y mandándole un correo a aquellos que hayan introducido su nombre.
Pero si queréis automatizarlo, id a la lista en MailChimp, y entrad en “Signup forms”, luego entrad en “General forms”. En “Forms and response emails” seleccionad “Update profile thank you page”. Ahora id a “Translate it”, y traducid el correo de agradecimiento que recibirá, aprovechando el campo donde dice “Profile Updated” para traducirlo por “Muchas gracias, tu código de descuento es ENVIO-GRATIS”
¡Y listo!
Bueno, este método tiene una peguilla, y es que si alguien actualiza aunque sea sólo su e-mail, recibirá el mismo correo… Podríamos dejarlo fino si el contenido del correo muestra sólo el código de descuento si el usuario introdujo su nombre, que se haría mediante este código:
*|IF:FNAME|*
Aquí tienes tu código de descuento: ENVIO-GRATIS
*|END:IF|*
Pues nada, ya tiene nuestro amigo Jorge otro mecanismo legal para conocer mejor a sus clientes ¿habéis visto la cantidad de formas que hay de resolver los requerimientos legales?
¡Hasta el próximo post!